La producción amateur (o ultra independiente) de una serie de ficción no es tarea fácil, no sólo por la unidad dramática de cada uno de los episodios, estructuras, personajes, etc, etc, sino porque, principalmente, la falta de recursos suele ser un gran enemigo. No todo el mundo tiene acceso a una cámara semidecente o a material de iluminación y a no ser que se trate de un concepto de serie muy simple (lo cual a menudo es lo más complicado) siempre necesitarás un mínimo de infraestructura. Por ejemplo, para las localizaciones necesitarás un permiso para rodar un día concreto. Este permiso no resulta díficil de pedir, pero habitualmente si lo es conseguirlo.
El tema está en que mantener un ritmo de producción y llevar a buen puerto un número de capítulos, la mayoría de las veces se convierte en algo inalcanzable. Menos mal que todo aquel con verdadera vocación sigue persistiendo.
En el proyecto que ocupa el tema de este blog: MemE, aún estamos en el punto inicial en el que no tenemos muchas ideas de cómo conseguir todo lo necesario. Hay una fuerte base fundamentada en los guiones, los diseños, los escenarios, los integrantes del proyecto y sobre todo las expectativas. Pero necesitamos algo básico: cámara y luces.
Seguro que toda está situación os suena a más de uno. Este texto es, en parte, para hacer balance de como van las cosas hasta el momento, pero sobre todo, para dar animos a quien alguna vez se encuentre en esta encrucijada:
Abre bien los ojos y echa mano de todo lo que tengas alrededor, se positivo, la suerte se fabrica y a veces hasta puede solicitarse al igual que un permiso para grabar en ciertas lugares.
Estos días estamos a la espera de que una institución pública, el instituto Angel de Saavedra, (Córdoba) que lleva años impartiendo cursos relacionados con la imagen y el sonido, nos eche un cable con la producción. Por ambas partes debería ser una opción atractiva, teniendo en cuenta que hay gente que este año terminará allí sus estudios de producción o realización, puede ser positivo colaborar en un proyecto ajeno al centro y para nosotros la posiblidad de contar, no sólo con el equipo y los alumnos, sino también con las instalaciones del centro, es un enorme aliciente.
En este punto estamos: tenemos una gran idea, tenemos un trabajado guión y tenemos ganas de sobra, sólo nos queda esperar encontrarnos con gente competente que consiga que nuestro trabajo y el de muchos y talentosos colaboradores llegue alguna vez a la meta: la difusión.
El tema está en que mantener un ritmo de producción y llevar a buen puerto un número de capítulos, la mayoría de las veces se convierte en algo inalcanzable. Menos mal que todo aquel con verdadera vocación sigue persistiendo.
En el proyecto que ocupa el tema de este blog: MemE, aún estamos en el punto inicial en el que no tenemos muchas ideas de cómo conseguir todo lo necesario. Hay una fuerte base fundamentada en los guiones, los diseños, los escenarios, los integrantes del proyecto y sobre todo las expectativas. Pero necesitamos algo básico: cámara y luces.
Seguro que toda está situación os suena a más de uno. Este texto es, en parte, para hacer balance de como van las cosas hasta el momento, pero sobre todo, para dar animos a quien alguna vez se encuentre en esta encrucijada:
Abre bien los ojos y echa mano de todo lo que tengas alrededor, se positivo, la suerte se fabrica y a veces hasta puede solicitarse al igual que un permiso para grabar en ciertas lugares.
Estos días estamos a la espera de que una institución pública, el instituto Angel de Saavedra, (Córdoba) que lleva años impartiendo cursos relacionados con la imagen y el sonido, nos eche un cable con la producción. Por ambas partes debería ser una opción atractiva, teniendo en cuenta que hay gente que este año terminará allí sus estudios de producción o realización, puede ser positivo colaborar en un proyecto ajeno al centro y para nosotros la posiblidad de contar, no sólo con el equipo y los alumnos, sino también con las instalaciones del centro, es un enorme aliciente.
En este punto estamos: tenemos una gran idea, tenemos un trabajado guión y tenemos ganas de sobra, sólo nos queda esperar encontrarnos con gente competente que consiga que nuestro trabajo y el de muchos y talentosos colaboradores llegue alguna vez a la meta: la difusión.
